Los cálculos renales son una enfermedad que puede afectar tanto a hombres como mujeres, presentándose con mayor frecuencia entre la cuarta y la sexta década de la vida. En los últimos años se ha reportado un aumento en la frecuencia, principalmente en el género femenino. Esto se relaciona a nuestros hábitos alimentarios junto a estilos de vida.
Síntomas de Cálculos Renales
La sintomatología clásica de cálculo renal es el “cólico renal”. Este corresponde a un dolor súbito de gran intensidad que se presenta en la región lumbar (espalda) y se puede irradiar o “correr” hacia la región anterior y zona genital. Esta forma de presentación es secundaria a la obstrucción del flujo de orina debido a la presencia del cálculo usualmente a nivel del uréter, que corresponde al conducto que une el riñón con la vejiga, determinando un aumento en la presión de la vía urinaria de forma secundaria. En otras ocasiones los cálculos renales pueden tener manifestaciones diferentes como la hematuria (presencia de sangre en la orina) o ser un hallazgo de un examen de imágenes.
Frente a la presencia de cálculos en el uréter, la gran mayoría de estos podrá ser eliminados de manera espontánea por parte del paciente, mientras otros (según su tamaño y su localización) requerirán de una cirugía para ser extraídos. Frente a la sospecha de un “cólico renal” o frente al diagnóstico de cálculos renales, es fundamental controlarse con un especialista en urología y poder establecer las opciones de tratamiento y posibilidades de expulsar su cálculo.
¿Cómo prevenir los Cálculos Renales?
Los Cálculos renales se asocian a una alta recurrencia, estimándose que hasta 50-70% de los pacientes desarrollaran nuevamente un cálculo en el plazo de 10 años.
La prevención de nuevos episodios y su consecutiva disminución en el tiempo se puede lograr con la ayuda de algunos hábitos alimentarios generales.
Dentro de estos es importante destacar:
- Consumir abundantes líquidos. Usualmente 2,5 a 3 litros al día para así lograr un volumen de orina de 2 litros/día. Dentro del consumo de líquidos es beneficioso considerar el consumo de jugos cítricos.
- Restringir el consumo de proteínas de origen animal (Vacuno, cerdo, pescado y aves)
- Mantener una adecuada ingesta de frutas y verduras. Idealmente consumir 4 o 5 porciones de frutas y verduras durante el día.
- Mantener el consumo de alimentos ricos en calcio. Antiguamente se recomendaba evitar el consumo de alimentos ricos en calcio, pero se ha demostrado que esta acción resulta en mayor recurrencia en ciertos pacientes.
- Restringir el consumo de sal. En este punto no basta sólo con no agregar sal a los alimentos al momento de comer. Debemos también considerar la sal que tienen los alimentos, en especial los enlatados y aderezos.
- Mantener un peso adecuado.
En los casos más severos (pacientes con múltiples episodios, algunas enfermedades asociadas, ciertos tipos de cálculos, niños) es necesario realizar un estudio metabólico que consiste en la recolección de orina en 24 horas asociado a exámenes de sangre para poder determinar de manera más especifica la causa y buscar su prevención con dieta y medicamentos.
Es fundamental controlarse los Cálculos Renales ya que a largo plazo pueden asociarse a deterioro en la función renal, calidad de vida y/u otras alteraciones. Si tiene alguna duda respecto a este tema no dude en consultar a su Urólogo para poder aclarar las preguntas que le surjan.
Dr. Gastón Astroza E.
Urología- Centro Médico Medicien